Dentro de la numerología el 12 representa la intuición, la
voluntad, la unión del cuerpo mente y el alma, el positivismo, la energía pura
y la perfección. El doce, al componerse de dos dígitos como el número 1 y el
número 2 (12), se une la energía y comienzos del uno y la dualidad y unidad del
dos.
Y no quería que se fuese el mes de julio de este año con una
nueva entrega de esta sección, que, aunque sigue siendo la menos leída y
compartida del blog (¿porqué será?), para acercarte algunos nuevos estudios,
ensayos o reflexiones que se siguen llevando a cabo en el ámbito de la profesión.
Permitidme un poco de nostalgia, cuando pienso que ya van cinco años de
compartir con nuestros lectores lo poco o mucho que en la difusión impresa/virtual
sobre danza podamos encontrar, hoy más que nunca en estas interminables redes
de comunicación para compartir conocimientos.
Aquí va la entrega nº 12 de este mes julio, desprovisto de
tantas obligaciones gracias al inicio de las vacaciones de verano, en el que
además aprovecho a ordenar, entre muchas cosas, los archivos digitales de estas
entregas.
En más de una entrevista de trabajo me han preguntado: ¿y
cómo te definirías profesionalmente?, a lo que contesto: “me considera un
ignorante con inquietudes y medianamente informado”, “y si algo no sé lo digo,
pero si me propones hacer algo, lo conseguiré”.
Más allá de bromas y de mis pequeñas licencias de diario
personal como bloguero, hoy te traigo algunos artículos sobre la danza (que de
eso trata este blog). El conocimiento siempre está en continua evolución y
descubrimientos; ¿o aún no te has enterado que tenemos más genes en común con
la mosca del vinagre y la rata que con el mono de Darwin?, todo lo demás es
cuestión de fe.