La Sala Roja de los Teatros del Canal estuvo abarrotada y el
cartel de “no hay localidades” estuvo colgado casi de inmediato nada más salir
a venta. Como nunca, he visto un público joven de estudiantes y profesionales
de la danza, dispuestos a disfrutar del espectáculo del día 26 de noviembre.
El elenco lo merecía, sobre todo por la talla de la mayoría
de sus artistas, dos de ellos españoles y que casi no podemos ver en escena en
los escenarios españoles, sumando otro plantel de primerísimas figuras en los
Ballets de los Teatros de Ópera de distintas capitales europeas.
Si bien las nuevas posibilidades que nos brindan las nuevas
tecnologías o las retransmisiones en directo de estos artistas y nos permiten
acercarnos para conocer su trabajo y su trayectoria profesionales, nunca es
comparable a verles en interpretaciones en directo, aunque sean pequeñas
escenas de obras de gran envergadura, con un despliegue asombroso de
virtuosismo técnico e interpretativo.
Este tipo de galas siempre se prestan para entrar en
comparaciones sobre ellos, sea por afinidad, conocimiento de la obra o del
repertorio elegido, pero nunca saldrás defraudado de la categoría estelar de
todos ellos; o al menos, sirven para conocer mejor tus propias preferencias
para seguirles o no, en un futuro.
Antes de extenderme con comentarios, fotos o vídeos
encontrados, quiero agradecer esta grande oportunidad que un festival de esta
categoría llega a ofrecer, a propios o a extraños; profesional, aficionado o
simple paseante no quedará inmune a descubrir este maravilloso arte.
La descripción y comentarios de las escenas sigue al pie de
la letra el orden del programa entregado en mano, por aquello de evitar preferencias en
el orden de aparición.
¡Un lujo, de veras que un lujo y un placer para el alma para
l@s que aman la danza!
¡ALLÁ VAMOS!...
