Para encontrar los primeros indicios de los Bailes de pareja debemos retroceder hasta las Danzas renacentistas o del Renacimiento europeo
(hoy denominadas danzas antiguas o danzas históricas), donde encontramos
documentación escrita al respecto en el contexto de las grandes cortes europeas
de esta época. La música y el baile llenarán los grandes salones de las cortes
de Italia, Francia, Inglaterra o España, como una de las tantas muestras de
ostentación de la aristocracia de la época.
Esto no quiere decir que probablemente no existieran
anteriormente, pero fue en esta época histórica particular donde surgen los
primeros maestros de danza que más tarde llevarían al surgimiento del ballet y
del resto de bailes.
De la Gallarda al Vals – Libros de danza en la BNE - Biblioteca
Nacional de España – Ésta fue una exposición realizada en 2011 y a partir de ella
surge mi reflexión para encontrar los indicios de los bailes de pareja.
Del catálogo de dicha exposición podemos extraer el siguiente
texto:
“La danza y la música
bailable han estado siempre presentes en todas las sociedades, en algunas lo
han hecho de forma más intensa, como en el caso de los estamentos superiores de
las sociedades europeas de los siglos XVI al XIX, que exaltaron la danza hasta
convertirla en una obsesión, un ingrediente imprescindible de la educación
cortesana: proliferaron los maestros de danza, las escuelas y los libros que
nobles y burgueses consumían con gran avidez. Mientras, el pueblo llano, con su
imaginación inagotable, se encargaba de suministrar las formas coreográficas y
musicales con las que se construyeron, mediante una evolución más o menos
rápida, las estilizadas danzas cortesanas y teatrales: minués, rigodones,
contradanzas, valses, fandangos, seguidillas y otras mil formas de la danza se
ejecutaron antes en las fiestas campesinas y en las tabernas que en los salones
y escenarios teatrales.
Esta exposición
pretende dar a conocer la excelente colección de libros de danza de esa época
que conserva la Biblioteca Nacional de España, procedentes en su mayor parte de
la antigua Biblioteca Real y de la colección que formó Francisco Asenjo
Barbieri (1823-1894), conocido compositor, musicólogo y bibliófilo, hijo y
nieto de bailarines, que a su muerte legó a la institución su extraordinaria
biblioteca musical”. José Carlos
Gosálvez Lara - Director del Departamento de Música y Audiovisuales (BNE).
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