A pesar de las premuras con que cada lunes nos despierta
esta primavera madrileña, tuve la ocasión de acercarme a presenciar “Mirage”,
una performance que la Compañía Nacional de Danza realizó como clausura a la
instalación que el artista Eugenio Ampudia realizó en el Matadero de Madrid.
Una experiencia única e irrepetible que pudimos disfrutar
los asistentes, en los únicos dos pases que se realizaron y que nos permitieron
disfrutar del arte efímero de la danza y en este tipo de circunstancias.
“Cada palabra es como
una innecesaria mancha en el silencio y en la nada” se llama esta obra del
artista vallisoletano y que estuvo en el espacio “Abierto x obras”, en el que
es sin lugar a dudas, el buque insignia de las artes en la Comunidad de
Madrid.
En este post voy a compartirte algunos datos de los protagonistas
con algunas imágenes. Que lo disfrutes.
Hasta la próxima entrega. Sergio
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La intervención de Eugenio Ampudia estuvo disponible en el
Matadero de Madrid, desde el 5 de febrero hasta el 17 de mayo y en la que el
Director de la Compañía Nacional de Danza quiso intervenir para su clausura.
La
instalación consistía en una pasarela de madera por la que el público puede
merodear rodea el bello objeto de agua estancada. La única manera de acceder a
él es a través de una llamada de teléfono al número +34657529016. Cada llamada
individual provoca una tímida onda en el agua. ¿Una innecesaria mancha en el
silencio y en la nada? La frase que da título a esta intervención de Eugenio
Ampudia (Valladolid, 1958), dicha por Samuel Beckett sobre su propio trabajo en
1969, juega, como esta instalación, con la paradoja. Aquella que reside en la
agencia de la imposibilidad, en la belleza del declive o en el sentido del
existencialismo.
Eugenio Ampudia (Valladolid, España, 1958), es un creador
involucrado con su entorno. Su trabajo indaga, bajo una actitud crítica, sobre
los procesos artísticos, el artista como gestor de ideas, el papel político de
los creadores, el significado de la obra de arte, las estrategias que permiten
ponerla en pie, sus mecanismos de producción, promoción y consumo, la eficacia
de los espacios asignados al arte, así como sobre el análisis y experiencia de
quien las contempla e interpreta.
“Mirage“, de Mattia Ruso y Antonio De Rosa, con la presencia
de siete bailarines de la CND, activan con su presencia y con su danza este
espacio realmente hipnotizante. Según nos han dicho “la pieza estaba centrada
en tres conceptos: nacimiento, caos y disolución final, de estos “habitantes del lago”.
Gracias por este sueño, que es un regalo para todos los
sentidos; tan efímero como cada minuto de nuestras propias vidas.
Hasta nuestra próxima melange. Sergio
A todos los que trabajan por el arte y la danza, a los que crean y a los que bailan: ¡muchas gracias!
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